domingo, 1 de agosto de 2010

domingo, 13 de septiembre de 2009

Hacer la maleta

Te vas de Road Trip. 1 mes. Tienes que hacer la maleta. Aggg

1. Llévate todo lo que quieras llevar pero piensa detenidamente si lo vas a usar.
2. Mete cosas que no te impotaría tirar en caso de sobrepeso a la vuelta.

3. Piensa en tu maleta. Debe tener ruedas. Las distancias en USA suelen ser extremadamente grandes, incluso en el metro de NY. Importante que tenga asas, para poder subir por las escaleritas simpáticas de la mencionada ciudad, o en su defecto, que te ayude un buen maromo que te encuentres por el camino.
- Maleta preferiblemente blanda. Hay preciosos macutos de Eastpak con ruedas que nos sirven de maravilla. Por algún extraño motivo, por el hecho de NO ser rígidas, en las maletas blanditas tienden a caber más cosas, o se amoldan mejor. Como inconveniente, no protegen tanto a objetos delicados como botellas. Intenta buscar una que tenga muchos compartimientos, para poder tener las cosas bien separadas. Una maleta blanda evita sustos por roturas en los aeropuertos, además de amoldarse mejor en los maleteros de los coches, en el caso de ir más cargaditos.
Mi última adquisición fue una de Decathlon, 90L TR PERF, pensada para 2 semanas, con muchos compartimientos y bastante rígida. Lo que más me gusta es el hueco separado para zapatos. A mi me caben unos 3 pares.

Aquí la dirección:
http://www.decathlon.es/ES/90l-tr-perf-62250060/#

Tiene muchos detalles. Os recomiendo que os paséis a verla.

Si pulsáis AQUÍ podéis ver muchos modelos diferentes del mismo tipo de maleta pero de Eastpak. Son más caras, lógicamente, pero se supone que están garantizadas de por vida (?)

3. Bolsas de supermercado: estúpido, sí. Útil: mucho más. Bolsas de la compra, de plástico, dobladas en forma de cuña, ahorran espacio y nos sirven para guardar la ropa sucia hasta que podamos lavarla. Lógicamente, es necesario que sean bolsas de camiseta, sino no hay dios que las cierre xD. Otra opción es ir "robando" las bosas de Laundry que proporcionan en los hoteles para que nos hagan la colada, solo que ya la haremos nosotros más tarde. Suelen estar en los cajones de los armarios.

4. Regleta de electricidad. Exageradaaaaaaa diréis. NO. Yo al menos que soy una gadgeto-friki tecnológica, si viajo, es áltamente probable que lleve conmigo una cámara, un portátil, el móvil, el ipod y seguro que la plancha de pelo. Creedme. NUNCA hay suficientes enchufes en las habitaciones de los hoteles para saciar tal demanda energética a la vez. La solución. Meter una regleta en la maleta. Si os vais de fin de semana es absurdo, pero viajando un gran número de días, me recordaréis lo útil que os fue. Las tenéis en Ikea por unos 4 euros.


5. Transformador de voltaje y adaptador de corriente. Ya que viajáis a USA, supongo que no es necesario recordaros que el enchufe no es el mismo. Son unas finitas patas delgadas, normalmente retractables en los aparatos de allí, y que en el caso de necesitar tierra, lleva un pirulo más gordo acompañando a las otras patitas.


Yo en su día ya me compré una especie de dado con las patas de todo el mundo y ya no me preocupo. Es apto para enchufes con tierra, por lo que así podremos enchufar cosas más potentes.

Lo segundo más importante es el Transformador de voltaje. En USA van a 100-110 V, por lo que nuestros aparatos, cargadores etc, no tendrían por qué funcionar. AFORTUNADAMENTE, desde hace unos años, GENERALMENTE todo es multivoltaje, por lo que no nos hará falta el transformador, que por cierto, el mío pesa un quintal. Si os fijáis en la letra pequeñita de los cargadores, suele poner 110-230 V o algo así. Si lo soporta, pues estupendísimo.

6. Medicinas. Ninguno queremos visitar los caros hospitales americanos, y bueno, aunque no sean americanos, no nos gusta ir al médico estando malos. Os recomiendo llevar preparado un blíster al menos de cada medicamento habitual que soléis tomar. Ibuprofeno es mano de santo para la mayoría de los posibles dolores que podamos tener. Melabón es mágico con el dolor de muelas y puede que nos alivie durante unos días, al menos hasta que lleguemos de vuelta al hogar y nos puedan sacar la muela.
Lo buenísimo de todo es que USA es el reino de los medicamentos. El oasis de las drogas. Así que medicinas básicas nunca os van a faltar. Encontraréis más Walgreens o cualquier otro Drugstore que McDonalds y en cualquier grande superficie como Walmart, hay pasillos repletos de pastillitas de colores para calmar todos nuestros males. Estoy hablando de medicinas sin receta por supuesto. Alivios como acidez, dolor de estómago, mareos o lubricadores de "juntas de huesos". Todos a nuestra disposición, genéricos incluidos, en cuanto lo necesitemos. Así que es probable que no lo tengáis que llevar de casa, sabéis donde estan, pero compréis donde compréis, llevad siempre algo encima.
Si necesitáis por alguna enfermedad, medicina con receta, llevad varios blísters más de los que necesitáis, y si es posible, repartidos por las maletas que llevéis, por si pierden alguna, y siempre otro en el bolso. Intentad que os hagan una receta para demostrar que la tomáis y si es posible, que os copien los ingredientes en inglés o en algo entendible, por si os la tuvieran que recetar allí.

7. Candado ¿Si o no?: según las normas de la seguridad en el transporte público de aviación o como se llame, la TSA, es OBLIGATORIO volar hacia, desde o entre territorio americano con la MALETA ABIERTA, esto es, SIN CANDADO y/o COMBINACIÓN SECRETA. Digamos que se reservan el derecho de abrir nuestra maleta en el caso de considerarla necesario. Creedme. Ocurre. Y te dejan una preciosa notita en el interior notificándote que han visto necesario abrirla por posible contenido sospechoso en el interior. En mi caso, creo que fue una cantimplora de plástico hortera (una yarda) de Las Vegas para un amigo. En el caso de querer abrirla y no haberles facilitado las cosas, la ley da luz verde a que te rompan el candado que hayas puesto, o en el caso de una maleta rígida, destrozarte la cerradura, con el inconveniente de que no podrás volver a cerrar la maleta nunca más. Se supone que están disponibles los candados especiales de la TSA, los cuales están completamente cerrados al público, pero que los trabajadores de la TSA tienen la llave maestra y los abrirán cuidadosamente en el caso de necesitar inspección. Por lo que yo vi en su momento cuestan una pasta y he visto que algunos tampoco los respetan, así que yo siempre viajo con la maleta sin candado y así no sufro.
Si os dan miedo las cremalleras, siempre podéis unirlas con una brida, que se corta fácilmente, o con una anilla de llavero. El candado nunca está demás, por si os alojáis en hostales o sitios que puedan parecer poco seguros. Yo siempre lo dejo puesto cuando me voy de la habitación, esté donde esté.

domingo, 6 de septiembre de 2009

Tecnología y cupones

Partiendo de la base de que suponemos que planteais un viaje a USA de duración media-larga, algo que os va a resultar imprescindible es un portatil o cualquier dispositivo con wifi desde el que os podáis conectar a internet.

Y aquí es donde el portátil juega el papel importante. Estados Unidos, un país donde abundan los HotSpots de Wifi, pero horriblemente vacío de Cybercafés donde poder conectarnos a mirar un mapa, escribir un email o reservar una habitación. No hay nada mejor que consultar el correo en pijama desde la confortable habitación del hotel y no rodeados de frikis jugando al Counter Strike en un cybercafé que habéis encontrado de casualidad en un barrio poco seguro. Ahora bien, en el caso de vida o muerte de no disponer de portátil ni un sitio donde conectaros, y siempre y cuando sea una población de tamaño un poco considerable, podréis ayudaros de mi querido FedEx Kinko's.



Son pequeñas oficinas realmente de serviciod de reprografía, donde además de fotocopias, encuadernaciones y servicio de paquetería, suele haber 3 o 4 mesas con ordenadores disponibles para su uso completo, algunas incluso con scanner y ciertos programas de diseño. ¿Caro? Sí, pero con perdón, os puede salvar el culo un día. Suelen tener horarios bastante amplios y se puede usar con tarjeta de crédito directamente en el ordenador o bien con unas tarjetas que se recargan con metálico. Fijaos bien en coger el ordenador con menos prestaciones si sólo os vais a meter en internet, así salen más baratos. Tenéis el precio por hora encima de cada ordenador.

Pero como decía al principio, nada como un portátil que te permita guardar tus fotos de disco duro, o tener tu messenger o tus favoritos guardados en caso de necesitarlo. Los ordenadores disponibles en los hoteles, o bien están supercapados, o siempre los ocupan los niños de la casa, durante horas y horas y no hay quien mire un email. Por eso la solución es llevar vuestro portátil y o bien disponer del wifi, que ya suele ser gratis en la mayoría de los hoteles, o poder acercaros a hotspots como los de starbucks o demás restaurantes sin tener que pagar un céntimo.

De todos modos (ahora es cuando comienza el párrafo de publicidad no pagada) mi máxima recomendación para llevar de tecnología es un iPod Touch o iPhone en su defecto. Quienes me conocen saben de mi obsesión por este pequeño aparato, el cual me lleva acompañando ya más de un año en mis aventuras por el mundo y nunca me ha fallado. Lo suficientemente pequeño para llevarlo en el bolso o en el bolsillo siempre y lo suficientemente potente para poder entrar en las páginas necesarias, consultar los mapas y aplicaciones descargadas e incluso recibir ofertas y cupones de lugares locales.



Recordad que siempre que hay vecindarios o calles muy habitadas SIEMPRE hay una conexión Wifi de algún vecino abierta, para tomar "prestada" durante unos minutos para poder orientarnos o buscar algún hotel. Siempre recomiendo aprovechar la tecnología disponible y asequible para ayudarnos en nuestros viajes, ya que nos pueden ahorrar horas de disgustos.

Si habéis conseguido Wifi en el hotel, no dudéis en visitar todas las páginas de las tiendas conocidas disponibles cerca de vuestra localización. Apuntaos a todas las newsletter (si hace falta, abríos una dirección de Gmail exclusivamente para recibir este tipo de correo) y conseguid todas las tarjetas de fidelización que podáis. América es la tierra de la fidelización y los cupones, y con una tontería como esa, os pueden hacer un 2x1 en algún hotel, del cual habríais pagado 2 noches enteras de no haberlo sabido.

Extended Stay Hotels, que ya hablaré más adelante de ellos, ofrecen muy buenas ofertas aplicables para cualquier momento de sus hoteles. Nos lo recomendaron los propios recepcionistas del hotel, apuntarnos a la Newsletter antes de hacer check-in, para conseguir un código para una noche gratis.
http://www.extendedstayhotels.com/

Duane Reade, mi pharmacy preferida de NY, ofrece la tarjeta de puntos, disponible en la propia tienda, y tienen descuentos muy golosos en cosas de uso frecuente como Vitamin Water y demás guarradas. Vais acumulando puntos también.
http://www.duanereade.com/

Gasolineras. Que ahora recuerde, tengo la tarjeta de puntos de las estaciones de servicio Speedy. Creo recordar que hacían descuentos en cafés y demás, cosa muy necesaria para los largos viajes en coche y acumulas puntos de la gasolina.

Starbucks Café Card. Imprescindible para poder conectaros al HotSpot de Starbucks en las cafeterías. Hay que comprarla y cargarla con algo de dinero para poder activarla, pero os servirá para siempre y de paso tienes café sin tener que llevar dinero encima.

No subestiméis los periódicos del domingo. Plagaditos de cupones. Algunos horribles y otros interesantes, sobretodo en el caso de productos de drugstore como cuchillas de afeitar o maquillaje de marcas como Maybelline o Covergirl.

Interesante también el mostrador de cupones que siempre hay en el Lobby de los hoteles. Miles de cupones y de folletos de atracciones locales y centros comerciales que suelen dar unos dólares de descuento o rebajas del 10-20%. Son pequeñas tonterías, pero se van ahorrando algunos eurillos con ello.



A mi lo de los cupones nunca se me olvidará, desde que vi a Macaulay Culkin en Sólo en Casa dando los cupones para hacer la compra. Mi héroe.

Disfrutad!

viernes, 4 de septiembre de 2009

Alquilar un coche

Desafortunadamente, USA no es un país famoso por su transporte público. Es un país gobernado por los coches, las camionetas y la gasolina (ya no tan) barata. El hecho de plantear un viaje alrededor de USA sin coche lo encuentro bastante no recomendable.

He tenido yo pocas experiencias en el transporte público, ahora mismo recuerdo el Greyhound (autobús) para recorrer el trayecto NYC a Buffalo para ir a las Cataratas del Niágara y no recuerdo viaje en autobús tan horrible como ese. Horriblemente largo, asientos incómodos y autobús viejo, además de una atmósfera y un público que tampoco daban mucha confianza.

Así que lo que decía, lo recomendable es el alquiler del coche. Todavía se puede aprovechar la ventaja que supone el precio más bajo del carburante en comparación con los precios de Europa, y los coches ya no consumen tantísimo como en los 80, por lo que el viaje en coche se hace bastante económico y permite una independencia casi total.

En primer lugar hay que tener en cuenta la edad con la que se alquila el coche. Con menos de 25 cobrarán seguramente un recargo bastante elevado, por lo que lo suyo es que aquella persona más mayor, sea la que alquile el coche a su nombre. Normalmente piden que se deje una tarjeta de crédito en depósito (no físicamente) por posibles daños, robos, etc, por lo que si vais mucho tiempo, lo mejor es reservar una tarjeta para reservar coches y olvidarnos de ella durante el resto del viaje.

En cuanto a papeleo, es necesario el Permiso de Conducir Internacional. Un vergonzoso librito gris con páginas y páginas con lo mismo en mucho idiomas, que no van a saber ni por donde abrirlo, pero hay que tenerlo. Tiene una duración de un año, pero curiosamente esto sólo lo pone en español, por lo que quizá se pueda amortizar un año más haciendo el truco (no me responsabilizo xD). Cuesta unos 10-15 euros y lo hacen en el momento en cualquier Jefatura Provincial de Tráfico. Necesaria una foto. Llevad siempre la cartulina rosa vergonzosa o la tarjeta nueva del permiso español siempre.

Os preguntarán si queréis seguro. Eso ya depende de vosotros. Yo ya he alquilado unas tres veces y nunca lo he pedido (y nunca me ha hecho falta, afortunadamente). Pero si estáis más seguros, adelante.

Puede que lo más importante de realizar un viaje en coche por Estados Unidos sea el GPS. Sí, puede que las nuevas generaciones nos hayamos vuelto más lelos y no sepamos orientarnos con un mapa, pero creedme cuando os digo que las direcciones y las autopistas americanas no son fáciles. Carreteras de 5 carriles, señales escritas en letra y no en número, y destinos totalmente desconocidos para nosotros no son facilidades en el camino. Algo que aprendí de allí es a interpretar las direcciones. Es muy importante fijarse bien en todo lo que dice la dirección, por ejemplo: 365 N Lincoln Rd. Esto significa, el número 354 del norte de la carretera Lincoln (inventadísimo). En el GPS debemos meter la dirección exactamente igual que la he escrito anteriormente. El hecho de no poner NORTE (N) o de seleccionar sin querer S supone llegar al destino incorrecto, que puede estar a 20 km de distancia del mismo número en el norte. Esto es, para la misma calle, siempre hay N y S, o E o W, por lo que siempre es importante fijarse.
Otra ventaja del GPS, supongo que dependiendo de las marcas, son los POI (Puntos de Interés). Más de una vez he llegado a alguna población sin tener reserva hotelera y gracias a los puntos de interés, he podido ir localizando hoteles o moteles en los que alejarme. O quizá, sufrir alguna avería y tener localizado algún taller cercano al que llamar para ver si están abiertos. Yo personalmente recomiendo Tom Tom, porque hasta ahora no me ha fallado, pero supongo que alternativas como los Garmin también son buenas.

En cuanto a normas de tráfico, hay que tener en cuenta que cada estado tiene su Ley. Hay estados que no permiten luces de neon, otros sí, unos permiten U-Turn, otros no, por lo que siempre hay que ir con cuidado. Dado que ninguno nos vamos a estudiar las normas de conducción de Florida antes de viajar, aquí una serie de consejos:

- Carpool. Viene a ser como el BUSVAO español. Sólo se permite la entrada para vehículos con 2 o más ocupantes. Supongo que siempre vajaréis en grupo, por lo que os animo a tomar estos carriles, porque suelen ir más fluidos. Allí no están separados por muros del resto de los carriles, son simplemente líneas pintadas en el suelo. Línea discontinua: podemos entrar o salir. Doble línea: permanecemos en el carril. Puede parecer una tontería, pero recordemos que al ser una vía rápida, no permite la salida en todos los desvíos o salidas que tiene la carretera normal, por lo que si prevemos que habrá que salir dentro de pocos kilómetros, sal del Carpool cuando la línea lo permita y no te saltes la doble. A mi me ha pasado y me han parado.



- U-Turn. Lo encontramos sobretodo en estados como California. Viene a ser un cambio de sentido un poco a lo bestia, entre las dos direcciones de los grandes boulevares. Al ser tan grandes, haciéndolo con precaución, nos permiten pasarnos al otro sin problemas. Debemos tener cuidado por que No en todos los estados está permitido. Siempre que se pueda, habrá un cartel. No los subestiméis. Allí no hay glorietas.



- Semáforos y giros: lo más desconcertante de la conducción por Estados Unidos. Calles de 4 carrilles y cruces con 20 semáforos. En ese caso, siempre habrá un semáforo por carril, apuntándote para que lo veas. Sencillo pero cuesta acostumbrarse. Se debe saber que, no se si en todos los estados, pero creo que si, justo el carril que está a la derecha, a pesar de que tenga el semáforo en rojo, permite el giro a la derecha mirando por precaución. Lo comprobaréis porque si hay coches detrás de vosotros mientras esperáis al verde, os pitarán para que sigáis avanzando. Pero recordad, siempre a la derecha, nunca recto. Para ir recto sí se respeta el semáforo.

- Policía. Intentad por todos los medios no ser parados por problemas de tráfico. No son plato de gusto de nadie y podemos salir del país con unas multas preciosas. La primera clave es no reconocer nunca el error que hemos cometido. "No se qué he hecho mal, sir". Siempre Sir, les encanta y les da respeto. Otra clave es no empezar diciendo que somos Spanish, sino Europeans, y luego si lo preguntan, decir Spanish. En ciertos estados, tienden a relacionar Spanish con Mexican y podemos meternos en follones innecesarios.

- Peajes: la mayoría permiten el pago con tarjeta, pero es altamente probable encontrarnos con alguno que sea de sólo monedas. De ahí viene el título de este blog: Save the Quarters. La moneda más usada de USA y por tanto la que debéis guardar como oro empaño porque la mayoría de las máquinas que las aceptan, sólo quieren esta moneda. Llevad siempre monedillas en el coche para posibles pagos. Cuidado con los Sun-Pass (Florida) y sus homólogos de otros estados. Son carriles de cobro remoto sin parar, golosísimos de saltar, pero que os aseguro que os llega la multa a España.



- Paradas: disfrutad de las ventajas de un país de carretera. Salvo excepciones, las gasolineras y demás estaciones de servicio son enormes y tremendamente bien equipadas, en las que siempre se pueden comprar marranadas y demás refrescos en tamaño king size. Muchos de ellos permiten rellenar el bote, así que no lo tiréis y os ahorrareis unos centimillos. Disfrutad del hueco de todos los coches para llevar bebidas. Se hace mucho más divertido.




Y que no falte la música!

El descapotable

Érase una vez una chica recién llegada a L.A. que quiso comenzar su Roadtrip por la WestCoast en un descapotable. Primera experiencia de este tipo. Ella quiso hacerlo por todo lo alto, así que se alquiló un Mustang V6 descapotable en una empresa de alquiler de coches de dudosa reputación y con oficina de olor a noodle chino.

Primera toma de contacto con el coche. Marcas y arañazos por todas partes. El asiento a 3 metros del volante. No veía ni llegaba a los pedales. No funcionaba la palanca de ajustarlo. Al descapotar el coche descubrió con horror que uno de los enganches de la capota estaba preciosamente roto, lo que podría significar un sobresalto en su camino a SFO. Salió del coche y cuantas más veces lo rodeaba, más marcas de alquileres previos se encontraba. Entró de nuevo a la oficina de olor extraño y le comunicó a la amable china americanizada todos los desperfectos del caballito. "No problem" dijo la chini. Pues vale, pero ¿y qué hago yo con el asiento? El asiento resultó ser eléctrico y requería cierta presión en el botón durante unos segundos para que funcionara.

Feliz de haber dejado claro lo que estaba claro, capota bajada y gps en mano, salió de LAX dirigiendo su destino hacia el centro de Los Ángeles. Tan abrasador era el calor aquel 10(?) de agosto, que tras una parada en Crossroads of the World, y pagado el parquímetro, decidió irse a un lugar más fresco y emprender camino a SFO sin pensarlo, Big Gulp en mano.

Inocente por su poca experiencia, llegó a uno de esos odiosos y conocidos atascos de la ciudad de Los Ángeles. Cinco carriles por sentido, abarrotados de suburbans y enormes camionetas pick-up, bajo un sol abrasador, y ella con la capota bajada. Tras dos horas de tráfico ultralento, recorrió la I5 en menos de lo que canta un gallo. Desgraciadamente, tras su parada en otro 7-Eleven, descubrió con horror las secuelas de los descapotables. Un dolor punzante en el cuero cabelludo. Descamación del idem. Raya del pelo quemada y un precioso bronceado que más que Californiano, fue agroman-camionero con marca de cinturón de seguridad de regalo.





Aprovechando el pit-stop en algún lugar pasado Universal Studios, localizó un FedEx-Kinkos. Visa en mano y por cierto, manos arriba por el atraco del servicio, pudo localizar un Motel6 a precio rata mediante Orbitz. Sabiendo que tenía el descanso asegurado para esa noche, las 400 millas que separan ambas ciudades, aprovisionó el estómago y carretera y manta, llegó a San Francisco al anochecer.
La moraleja de todo esto es que si alquiláis un coche y estáis totalmente deseosos de que sea un descapotable, siempre gorro. Sol = pupa. Buena hidratación y no desestiméis los recursos online.

Mañana más sobre el alquiler de coches y la conducción!

¿Nos vamos a USA?

¿Nos vamos? Esa es la primera pregunta que os hacéis. ¿Cómo disfrutar más de esos días de vacaciones que tanto se anhelan durante el año?

Lo primero en lo que hay que pensar es en la disponibilidad de días. Depende de vosotros cuánto queréis ver, pero vayáis donde vayáis, lo suyo son mínimo 5 días, por eso del jetlag y demás adaptaciones. ¿Roadtrip o varias ciudades? En ese caso, mejor 15 a 1 mes si se puede. A todos nos gusta verlo absolutamente todo de las ciudades, pero el rollo chino-que-visita-toda-europa-en-15-días creedme que es demasiado duro y puede que los anuncios de Dulcolax no sean en vano.

No hay nada mejor que poder ver las ciudades tranquilamente, sin prisas, viviéndolas, haciendo lo que hacen los habitantes, yendo a los supermercados. Así que lo primero, poder disponer de días suficientes, sino, a la vuelta os arrepentiréis de todo lo que os habéis dejado por ver y del horrible dolor de pies con el que traéis en la maleta.

¿Dinero? Pues depende de lo pijos que seamos. Cuando digo pijos, quiero decir el nivel de mochileros que estamos dispuestos a llevar durante este viaje. Hay ciudades como NY que no merecen la pena un hotel bueno, porque además de caros, poco lo vamos a pisar. No obstante, es recomendable darse un caprichito hotelero, quizá en Las Vegas si estáis haciendo la Costa Oeste, o en Miami si os decidís por Florida. Aún así, ya iré contando alternativas hoteleras disponibles en USA.

En cuanto a comida, depende de lo que estéis dispuestos a sufrir y a engordar. Tened en cuenta el doloroso TAX que te incluyen en toda factura americana, así como el horrible Tip de al menos el 10% en todos los restaurantes sentados en los que te sirven. Importante a tener en cuenta. Siempre quedan las alternativas baratas de comida más o menos rápida, que allí tiene lo bueno de que hay amplísima variedad y para todos los gustos. Malos, buenos, y menos malos. Pero al igual que en los hoteles, un capricho durante el viaje aliviará la tensión de comer mal. (Tampoco se come tan mal, es un decir)

En cuanto al avión, igualmente lo hablaré en posts siguientes, conviene dejarlo zanjado lo primero de todo, porque entre otras cosas, los billetes overseas son los típicos que cuanto más pronto lo cojas, más baratos, salvo ofertas de última hora (pero nadie quiere estar jugando a la lotería de si me iré o no me iré los días antes)
Si puede ser, vuelo directo sin duda. Se sufre menos y se pierden menos las maletas. Pero siempre lo que salga más barato, tampoco queremos arruinarnos por unas míseras 8 horas de vuelo a precio de avión Australia.

Recordad. Pasaporte en regla y deditos bien limpios, que ya piden los 10 dedos de la mano y una foto en la frontera.

Disfrutad!

Comenzamos

En primer lugar, he de dar las gracias a todas aquellas personas que me han animado a crear este blog, así como a las que me han formado vacacionalmente para ser capaz de llevarlo a cabo.

Me equivocaré en muchas cosas. Exageraré. En otras veréis que soy un poco neurótica. Pero los viajes son así. Personales e intransferibles.